Un mar de hielo en la tierra verde. Groelandia
Groelandia, la segunda isla más grande del mundo después de Australia, es una región autónoma del Reino de Dinamarca que está cubierta, en el 84% de su extensión por hielo. Después de la Antártida, cuenta con la mayor masa de hielo compacta del planeta, con una superficie mayor que Japón. En esta isla, todo versa en torno al agua congelada, así que no podemos plantearnos un viaje a Groelandia sin planificar alguna aventura sobre su manto helado.
Son muchas los aventureros que han realizado sus hazañas en estas tierras. Desde las distintas expediciones que han cruzado el Inlandis, el manto helado que cubre Groelandia, a aquellos que han circunnavegando la isla en todo tipo de embarcaciones. Entre todos ellos, Ramón Larramendi, el propietario de la agencia de viajes de aventura Tierras Polares, quizás es uno de los más destacados con sus distintas travesías en esta tierra durante más de 25 años. Precisamente, de la mano de su equipo, vivimos algunos momentos mágicos en Groelandia, haciendo rutas por los glaciares y practicando Kayak frente a los iceberg flotantes en los bellísimos fiordos del sur de la inmensa isla.
Caminar sobre el hielo siempre me ha parecido una experiencia extraña. La consistencia de los crampones y de todo el equipo que llevamos (guantes, casco, gafas, arnés etc.) aportan una sensación de seguridad y un aplome que al principio al cerebro la cuesta asociar al resbaladizo e inconsistente hielo. Esta sensación poco a poco desaparece, comenzando nuestro cuerpo y nuestra mente a disfrutar de poder andar por la cambiante agua helada, disfrutando de sus variaciones de color, de su brillo, de sus extrañas y caprichosas formas, de la subida de adrenalina con el sentir de un crujido o la existencia de una grieta.
Del mismo modo, acercarnos en un pequeño kayak a los inmensos bloques de hielo flotantes nos hace sentir pequeños, frágiles, a merced de una naturaleza que nos recuerda, en lo inmensa y majestuosas de las paredes y bloques de hielo, lo grandiosa de la misma.
Un viaje a Groelandia es un viaje a nuestros orígenes, a sensaciones y paisajes que permanecen en la tierra después de miles de años de existencia, recuerdo lejano de lo que fue la Glaciación del Planeta.
Recomendaciones
- Viajar por Groelandia por nuestra cuenta puede ser muy costoso, al no existir apenas infraestructuras fuera de las pequeñas ciudades existentes. Lo más razonable para conseguir un precio más o menos accesible es contratar algún paquete con alguna de las agencias existentes. Tierras polares (www.tierraspolares.es) es una de las más populares.
- Los precios en Groelandia son hasta cuatro veces más caros que en España, debido que casi todos los productos son importados.
- Groelandia es inmensa, una de las zonas más espectaculares y accesibles es la de los fiordos del sur de la isla.