Una lección de vida. Los Leopardos del Serengueti.

En el parque nacional del Serengueti, en el norte de Tanzania, vivimos uno de esos momentos mágicos que se recuerdan toda la vida. Llevábamos un rato parados frente a unos matorrales donde nos habían dicho que había un leopardo…pero no se veía nada. Estuvimos buscando durante casi media hora sin resultado. Ya íbamos a darnos por vencidos, cuando apareció.

Elegante, majestuosa, bella, indiferente a los que allí nos encontrábamos apareció un precioso ejemplar de Leopardo. Subió justo al árbol que teníamos enfrente. Comenzó a limpiarse en un ritual todos los días repetidos. El momento era, por el animal, la luz y la atmósfera que se creó, fascinante. Sin embargo, lo mejor estaba por llegar. En cierto momento comenzó a emitir unos pequeños gruñidos en dirección hacia la maleza. Lentamente bajó del árbol, se dirigió a los arbustos, y cogió una liebre que habría cazado anteriormente. No era para comérsela. Al menos todavía no. En ese momento, y de forma inesperada, de entre los matorrales salió un encantador cachorro de leopardo…pequeño, dulce e inexperto. La madre leopardo comenzó entonces a rugir y hacer jugar a la cría con la liebre cazada. Entre juegos, la madre leopardo estaba enseñando a su cría a subir las presas a los árboles para comérselas, a la vez que ayudándole a fortalecer el cuello y los músculos de la pequeña cría. Un momento mágico, una enseñanza que bien puede valer una vida.

Recomendaciones

En el norte de Tanzania, se encuentran los muy recomendables parques nacionales del Serenguetti y del Crater del Ngorongoro. Otros parques recomendables son el parque del Tangarire y en lago Manyara.

El safari lo realizamos con una buena compañía, Tropical Trails (www.tropicaltrails.com). 

Debemos asegurarnos contratar un safari en función de nuestros deseos. En plan más económico y aventurero nos quedaremos en tiendas de campaña en Campsites. En el caso de desear mayor comodidad e incluso lujo deberemos acomodarnos en Lodge.

Dada la distancia desde Arusha recomiendo volar al parque nacional del Serengueti, es un vuelo económico y precioso de una hora que nos ahorrará casi seis horas de coche.